Antes de tratar de invocar a un ángel
para ayudar a otra persona, es importante recordar que todo ser humano
tiene libre albedrío y que no nos esta permitido involucrarnos en su
vida para tratar de cambiarla sin su permiso.
Se puede enviar energía Angelical a
alguien que esta enfermo, que tiene problemas graves o que esta pasando
por una crisis severa para que esta energía le ayude a trascender esa
enfermedad o crisis por si mismo.
Pero no se debe usar energía Angelical
para que esta persona haga algo que nosotros creemos que debe hacer o
queremos que haga y que la persona no haría por si misma, ya que esto es
infringir en su derecho de libertad de acción.
Una vez que estén seguros de que su
intención es la de ayudar y no de obligar a una persona, pueden llevar a
cabo el ritual Angelical para enviar energías a esta.
Este ritual angelical requiere una foto
reciente de la persona.
La foto se coloca sobre un espejo redondo colocado a su vez sobre un
paño de seda o de satén blanco.
Se escoge uno de los siete ángeles
regentes planetarios, dependiendo del problema de la persona.
Por ejemplo, si la persona esta enferma
se puede utilizar a Miguel, regente del Sol en el sistema planetario, el
cual es el origen de la vida y fuente de la salud, o a Rafael que es el
ángel que sana, conocido como el medico divino.
Si el ángel que se escoge es Rafael, se
rodea la foto con ocho velas color naranja, ya que el número ocho y el
color naranja son atributos planetarios de Mercurio y de Rafael.
Si se escoge a Miguel, se usan seis velas
amarillas porque este es el color asociado con el Sol y el seis es su
número cabalístico.
Sobre la foto se coloca una de las
piedras asociadas con ese ángel para ayudar a establecer contacto con
él.
Se cierran los ojos y se visualiza a la
persona sana y llena de alegría.
Tan pronto se visualiza a la persona, se repite el nombre del ángel
varias veces, dependiendo de su número.
Si es Miguel se pronuncia su nombre seis
veces; si es Rafael, ocho veces.
Esto ayuda a canalizar la energía del
ángel hacia esa persona.
De inmediato se abren los ojos y se visualiza un rayo de luz que procede
del ángel hasta la piedra que esta sobre la foto, cuya energía penetra a
través de la imagen de la persona hasta el espejo que se use para enviar
la energía a ésta.
Este ritual se debe llevar a cabo en el
día asociado con el ángel, a la una o a las ocho de la mañana, a las
tres de la tarde a las diez de la noche, que son las horas angelicales
de cada día.
Este ritual ayuda grandemente a la
persona y se puede repetir varias veces para multiplicar sus energías y
esta pueda resolver su problema por si misma.
Si deciden repetir el ritual, recuerden
que solo lo pueden hacer una vez por semana, ya que solo puede ser hecho
en el día regido por ese ángel. Es recomendable dejar la foto sobre el
espejo con la piedra encima mientras la persona resuelve su problema.