Es el encargado de curar la Tierra y a través de
ella ofrece un hogar a los seres humanos a quienes también cura de
sus enfermedades; por lo tanto es quien vela por el cuidado de los
sistemas ecológicos.
Es el Arcángel que le pedimos para sanar nuestro
Cuerpo y nuestra Alma o el de otra persona.
En el libro de Tobías en el Antiguo Testamento el Arcángel Rafael es
quién curó a Tobías padre, liberó a Sara de sus angustias y fue
compañero del joven Tobías durante su largo viaje, enseñándole como
curar la ceguera de su padre.
Cuando Rafael aparece en tu vida ha llegado el
momento de sanarte de esas viejas heridas que no se ven y te hacen
llorar el alma. Esas heridas que a veces queremos hacer pasar
desapercibidas, ignorándolas o negándolas, heridas que vienen a
nosotros para purificarnos y hacernos crecer, quien las niega se
sacrifica inconscientemente . Cuando las personas se sienten
victimas le están dando el poder a lo que el o ella crea el
victimario sin darse cuenta que es la persona misma quien esta allí
por que no reclama su poder. Muchas veces para salir de esa
situación o situaciones hace falta una sanación en nuestro corazón y
mucho mas en recobrar el alma rota . Es cuando entonces necesitamos
al Arcángel Rafael para sanar nuestro cuerpo y nuestra alma ,
recobrando nuestro poder y saliendo adelante con toda nuestra fuerza
espiritual para vivir la experiencias que estamos escogiendo vivir .
Si sientes que tu misión esta en el campo de la sanación Invoca a
Rafael para trabajar en todo tipo de sanaciones, sean estas internas
o externas y pidele que te enseñe el camino de la sanación.
Su emanación de Luz es el rayo color Verde. Guardián del Este y su
elemento es el aire. A la derecha esta la imagen de su sigilo y
sello sagrado.
A Rafael se le representa con un cayado en la mano y
un pez en la otra como símbolo de su odisea con Tobías. En alguna de
sus imágenes o presentaciones lleva en sus manos un frasco con un
bálsamo, una espada y una fecha bien afilada.
En el Cristianismo: De él se ha dicho que es "una de las cuatro
Presencias puestas por encima de todas las enfermedades y de todas
las heridas de los hijos de los hombres" (Enoch).
El fundamento escrito más común de esta creencia es la historia de
Tobías (cuyo libro la Reforma es considerado apócrifo por el
Vaticano)
Se dice que le dio a Noé un libro médico que contenía la cura para
todas las enfermedades. Es el encargado de sanar la tierra y a todos
los humanos. Curación y clemencia: envía rayos espirituales a los
hospitales, instituciones y moradas, lugares que precisan sus rayos
curativos
Para la astrología: Es el protector de los signos astrológicos Virgo
y Géminis, ya que ambos signos están regidos por el planeta
Mercurio. Su elemento es el aire.
Los espiritualistas afirman: que es el gobernante de Mercurio y su
embajador planetario en la tierra. Tiene la capacidad de sanar
cualquier enfermedad a los humanos. Tanto físico como mental. (ya
que es el embajador de Mercurio - La mente esta regida por este
planeta)
Los estudiosos Judíos: dicen de Rafael que es uno de los guardianes
ó Grigori, que tienen una continua vigilia sobre las puertas del
cielo y también que es uno de los guías en Sheol, donde según los
judíos van las almas cuando el cuerpo muere. Es uno de los cuatro
grandes príncipes que están frente al Trono de Dios y según fuentes
rabínicas, uno de los tres ángeles que visitaron a Abraham; los
otros son Miguel y Gabriel. Se le conoce como el ángel de la
simpatía, ya que siempre esta risueño y en el Árbol de la Vida; es
el ángel del octavo Sephirarh, Hot "Gloria".
En el Zohar (libro judío del esplendor) se dice que es el "encargado
de curar la tierra, la tierra que brinda un lugar al hombre, al que
también cura sus enfermedades". Custodia el Este y debe ser invocado
mirando hacia allí.
Para los metafísicos: Rafael pertenece al rayo verde (verdad,
curación, consagración, concentración). Rafael es el ángel de la
alborada, regente del segundo cielo y uno de los príncipes regentes
de los Querubines y de los Arcángeles y jefe del coro de las
virtudes. Pertenece a cuatro de los coros angelicales: los
Serafines, los Querubines, las Dominaciones y los Poderes. Su nombre
es de origen caldeo y originalmente era Labial. Se le invoca o
agradece Los días miércoles con vela amarilla, Los jueves vela verde
para salud.